martes, 15 de mayo de 2007

Refranero mentiroso.

Quien dice en la ancestral cultura popular que los trenes en la vida solo pasan una vez. Desde pequeño he vivido en la perplejidad de ver continuamente desde la estación de tren, pasar una y otra vez comboyes dirección a un mismo destino. Con los años entendí que el viejo refrán tenia un significado bastante mas ambiguo, del que la mente de un jovenzuelo con granos podia entender. Saltando lo puramente palpable, la gente se lanza a la toma de decisiones, a veces de forma impulsiva y poco estructurada, basandose en el refran.." nunca se sabe si este tren volvera a parar en tu estación" "No dejes pasar el tren que posiblemente no vuelva a pasar" y un sinfín de variabilidades sintácticas y gramáticas que giran en un mismo eje.... no pierdas la oportunidad que te ofrece la vida. Bien. La experiencia personal me dice que todo eso esta basado en algo realmente labil e incierto. La vida como todo es cíclica. Lo que te ha ocurrido una vez, a lo largo de los años te puede volver a ocurrir, solamente que las circustancias que lo rodean puede ser diferente. Hace dos años vi un tren que se acercaba a mi estación, era el tren mas bonito que he visto nunca. Pensé que ese tren lo tenia que coger fuera como fuera y aún a sabiendas que el tren estaba completo y yo llevaba un pesado equipaje corrí por el andén hasta alcanzar una puerta. Con la mano llegé a tocar el pomo, pero la velocidad del tren era diferente a la mia y caí de cabeza al andén. Al levantarme me di cuenta que ese tren no era el mio. Que el tren era demasiado tren para mi. que podia haberme esperado en el andén hasta asegurarme si el tren pararia o no, en mi estación, pero no paró. Pense´que lo habia perdido para siempre y que nunca mas lo volveria a ver. Hace poco me acerqué a la estación, ya no llevaba equipaje, y lo vi aparecer de nuevo. Seguia igual de hermoso que hace dos años, igual de brillante. Me paré recordando el tortazo que me dí dos años atras. Noté que el tren disminuia de velocidad, pero yo me resistia a acercarme a él, pensaba que solo eran alucinaciones mias, simples ganas de volver a intentar subirme a él. Pero el tren paraba y caminé, me acerqué y rezé. Ahora tengo cogido el pomo de la puerta. Espero no caerme de él. En todo caso haré caso del maquinista que me dijo sube, siente y no pienses.Si el resto de mi vida viajaré en ese tren, solo el tiempo lo dirá. Espero que si

1 comentario:

evminguez dijo...

Estamos recogiendo historias treneras en este blog: http://viasparalelas.wordpress.com/, y estamos también en facebook. en el blog tienes toda la información. ¿no querrías enviarnos esta historia? en cualquier caso, enhorabuena por el blog y por la historia.
Elena